La tercera campaña de Huracán en el Profesionalismo tuvo rasgos similares a las anteriores: irregularidad y episodios históricos. Aunque a consecuencia de una primera rueda muy floja, terminó debajo de la mitad de la tabla.
Pero hubo dos triunfos memorables. El primero: el 16 de abril, por la sexta fecha, Huracán obtuvo su primer triunfo ante River en esta Era. Fue un 2-0 ante el defensor del título con un grito de un Masantonio imparable y otro de Francisco Rodríguez. El arquero Angel Bossio, La Maravilla Elástica, quedó de rodillas en el suelo de la cancha de la Avenida Alcorta. El segundo: El 6 de agosto, por la 21a. fecha, en Avenida La Plata e Inclán, Huracán obtuvo la mayor goleada como visitante (junto al 5-2 de 1939) en el clásico frente a San Lorenzo. Ese día, los quemeros se impusieron 4-1, con dos goles de Masantonio, uno de Ricardo Gil y el cuarto de José Cordero. Fue un baile y una fiesta. No se trataba de un triunfo cualquiera: ese año, el clásico rival ganó su primer título profesional y así sumó su cuarta vuelta olímpica de Liga.
Además, al único grande que Huracán no pudo derrotar en la temporada fue a Boca (0-2 de local; y 2-3 de visitante), ya que también se impuso a Independiente (3-0, de local, con goles de Masantonio, Cordero y Gil) y a Racing (2-1, en Parque de los Patricios, con otro doblete del Gran Masa).
Pero un puñado de derrotas inesperadas (por ejemplo, 1-3 y 0-1 ante Tigre, uno de los peores equipos del campeonato), la irregularidad en el juego y la ausencia de Masantonio en siete partidos atentaron contra la campaña.
Sin embargo, Huracán consiguió un título, el octavo de la historia: la Copa Consuelo Beccar Varela, en la que participaron --entre otros-- Boca, River y San Lorenzo. La final, disputada el 27 de enero de 1934, fue ante Lanús. Y sucedió un episodio que merece recuerdo: al vencer 2-1, Huracán dio la vuelta olímpica en la cancha de San Lorenzo.
Otro hito en la temporada fue la despedida de Cesáreo Onzari, un símbolo de los días del Amateurismo, un crack de Selección, un paradigma del wing izquierdo, el autor del primer gol olímpico. Su adiós marcó también el tardío símbolo del fin de un ciclo brillante.
El diario lo cuenta en el inicio del comentario de la derrota de Huracán ante Boca, en la segunda ronda: retrata el interés que generaba el encuentro y el carácter de clásico que tenía por esos días, herencia de La Década de Oro.
Campaña:
Décimosegundo. G 10; E 7; P 17 / GF 49; GC 60.
Posiciones:
1. San Lorenzo 50 pts.
2. Boca 49 pts.
3. Racing 48 pts.
Figuras:
1. Herminio Masantonio, delantero.
2. Máximo Federici, centrojás.
3. José Cordero, inside.
3. Ricardo Gil, wing izquierdo.
El inolvidable 4-1 ante el San Lorenzo campeón de este año, como visitante. Uno de los grandés éxitos en la historia del clásico.
Partidos para la historia:
1. 6/8: San Lorenzo 1-Huracán 4. Uno de los más importantes triunfos de Huracán frente a San Lorenzo en la historia. Fue la primera victoria quemera en Inclan y Avenida La Plata. Y se consiguió ante el campeón de la temporada. Y es, además, la mayor victoria como visitante de Huracán en el clásico, junto al 5-2 de 1939.
2. 16/4: Huracán 2-River 0. Primer éxito ante River en la Era Profesional. Huracán ya le había ganado cuatro veces en nueve partidos durante el Amateurismo (1-0 en 1914; 3-0 en 1917; 4-0 en 1918; y 2-0 en 1928).
3. 30/7 Huracán 3-Independiente 0. Clara victoria con goles de Masantonio, Cordero y Gil.