jueves, noviembre 19, 2015

La elegancia obligatoria


Los años veinte y una foto perdida de los hinchas de Huracán. Para ver a los mejores de ese tiempo (el Globo de Newbery fue -junto a Boca, Peñarol y Nacional- el más campeón de aquella década en el Río de la Plata, entonces el más destacado del mundo) había que vestirse de gala. El mejor traje y el chambergo más nuevo era infaltable para acercarse a la vieja cancha de la Avenida Chiclana o a la de madera en Alcorta y Luna (el estadio Jorge Newbery). Aquel fútbol merecía tal elegancia obligatoria.