sábado, septiembre 12, 2015

Carajos al aire


Por Ricardo Sapia*
Minuto 26 del ST. Miro al cielo y le pido a mi viejo “una para este lado”. Y el viejo me escuchó. Nos escuchó a todos los Quemeros. Llanto. Emoción pura. Grito pero me freno. Las lágrimas me ahogan. Veo desborde. Caras rojas, venas infladas. Se me suben a caballito. No es para menos. Carajos al aire. El tiro libre más hermoso. ¡Gooool, papá! ¡Gol Pa pa pa... Patricio! Parque Patricios. El barrio, el mío, el de ellos (no, el de ellos no... ¡de qué barrio sos...!). Ahora huevo y también fóbal. Porque se lo ganamos jugando. Enfrente eligieron pegar. Un expulsado. Dos. Punteros. Veremos. Del Ducó te fuiste cabeza gacha y con la... ¡Un minuto de silenciooooo... shhhh... para el Cuervo que está muerto! Muerto de miedo viniste a defender un invicto y la punta. No era para tanto. Es un clásico, che.

Huracán está feliz. Los artífices se quedan a puro salto de cara a la Bonavena. Y los hinchas, los de las cábalas o la fe ciega. Los cautelosos pero esperanzados. Ninguno desaloja el Palacio. Desalojo. Vos, nómade. Definite dónde vas a sentar bases. Yo, yo vivo en la Quema. De acá a la eternidad. Y a seguir. Dale que dale. No es la copa del mundo pero es el mano a mano contra el rival de toda la vida. Se palpita antes. Se agita durante. Y se festeja después. Esta vez es nuestro. ¿La próxima? La próxima se verá...

Nada termina con esto. Pero la puta que me infla el pecho. Hay que sostenerse. Faltan seis fechas para que el deber esté cumplido. Y no permito que se relajen. No sirve si este 1-0 no nos empuja a más. A pelear el que viene. Y el otro. A ganar. Globo, metele bomba anímica. Ahora andá. Subite a tu locura. Hoy vale acostarse abrazando la de Newbery.

*Periodista. Texto publicado en el diario Olé.