Carlos Arano, el subcapitán de este Huracán para el aplauso y para la historia, jugará a partir de julio en el Aris Salónica, de Grecia. Así lo anunció su nuevo club. Es un caso de una verdad que no agrada: la del éxodo inminente.
Huracán vive ahora, con 17 fechas del Clausura disputadas, días felices: está frente a la posibilidad de su sexto título de Liga, el primero en 36 años, y sólo depende de dos triunfos. Pero hay otra verdad detrás de este presente futbolístico encantador: el futuro de este equipo para el aplauso es una sucesión de incógnitas o de incómodas certezas. La novedad más inmediata es una despedida: se confirmó ayer el traspaso de Carlos Arano (subcapitán del equipo) al Aris Salónica. Lo anunció la institución griega en su sitio oficial: "Aris FC anuncia la adquisición del argentino Carlos Andrés Arano. El futbolista firmó un contrato por los próximos dos años". En la imagen que acompaña el texto aparece el lateral izquierdo festejando su gol en el 4-1 ante Argentinos, en este torneo.
El de Arano no es el único caso de despedidas posibles. Cualquier oferta que aparezca por Paolo Goltz será escuchada con entusiasmo. El capitán es uno de los tres futbolistas cuyo pase es (en parte) patrimonio del club. La última joya de Huracán, Matías Defederico, está en una situación similar. Es más: en su contrato figura una suerte de cláusula de rescisión (inferior a los dos millones de dólares).
Las situaciones de Mario Bolatti (está a préstamo del Porto) y de Javier Pastore (ahora, sólo el 10 por ciento pertenece al club) son de difícil resolución, más allá de la manifestación pública de los futbolistas respecto del deseo de continuar en el club. Algo parecido sucede con César González.
Se sabe, sin embargo, que Eduardo Domínguez y Federico Nieto continuarán hasta diciembre. Y que Gastón Monzón pertenece a la institución. Además, se está negociando para que Carlos Araujo y Patricio Toranzo continúen al menos otra temporada.
Texto publicado por el autor del Blog, en Clarín.