viernes, mayo 25, 2018

Nuestro 25 de mayo, nuestra otra Patria


Por Gonzalo Minici*
«Fúndase en Buenos Aires con fecha 25 de mayo de 1903 el Club Atlético Huracán y reorganizado el 1º de noviembre de 1908, con el fin de fomentar el juego atlético, especialmente el football» reza el acta constitutiva del Globo, redactada el 20 de julio de 1910 con retroactividad y la firma de José Laguna (presidente de entonces).

Se abrazan el pasado, el presente y el futuro: esta fecha es la aniversaria más importante. El día en el que todo se recuerda. El día en el que todo sucede…

Hoy cumplen años Masantonio, Stábile, Newbery y Bonavena. En la infinidad del cielo, trece estrellas resplandecen incandescentes. La gloria de la década del veinte sale del Río de La Plata a circunnavegar la Tierra; las aguerridas copas de los cuarenta desempolvan su sacrificio, mientras la espectacularidad de los setentones días felices vuelve a ser y las atajadas de Marcos Díaz se reinventan en el San Juan de Aldo Cantoni.

Hoy, Pedro Martínez debuta en la Selección Argentina. Onzari funda el «gol olímpico», Bartolucci la «palomita». Juan Pratto y Ángel Chiesa vuelven a campeonar, cuando Italia entera es Nóbile y Valentino Mazzola sueña otra vez con subirse al Globo. Hoy festeja el humor de Alfredo Barbieri. Y las guitarras de su padre y Riverol, acompañando la voz de Gardel.

Hoy brilla el oro olímpico de Casanovas en Alemania. La «Aplanadora» de 1939 pasa de nuevo. Baldonedo golea a Brasil; «Tucho» Méndez a toda América. Di Stéfano da sus primeros pasos y Jorge Alberti juega un partido más. En los documentos oficiales de AFA se deja constancia de la grandeza institucional, y el Palacio Ducó, precioso Patrimonio Histórico, se reconstruye ladrillo a ladrillo.

Hoy se reconoce a Viberti. Y se aplaude la elegancia de Brindisi, la locura de René y la filosofía de Menotti. Carrascosa vuelve a hacer la banda izquierda y Barrios convierte otro penal. El vozarrón de Basile guía los caños de Pastore. Apuzzo apaga un incendio gritando «¡Huracampeón!» y todos presiden, desde Caimi hasta Nadur.

Hoy el tango se viste de hinchada y el arrabal toma color. Nueva Pompeya es vieja cuna; Parque Patricios, eterna casa. Las letras de Centeya se reescriben, el arte de Ferrer resurge, la voz de Manzi resuena. Renace el primer banderazo. La Reina de La Quema y el telón pionero del fútbol argentino se vuelven a coser. Una multitud peregrina al Obelisco celebrando su identidad. Y la de todos los Huracanes del planeta, cientos en cuatro continentes, encuentra exégesis.

Esta no es la efeméride de una «entidad social y deportiva» (en líneas generales), «cuya principal actividad es el fútbol» (acentuando más), ni una «asociación civil con personalidad jurídica» (legalmente hablando). Hoy se conmemora a Huracán. Una realidad cultural en sí misma, borrando las líneas de cualquier limitación definitoria. Un «todo» complejo. Por eso su mundo, su propio mundo, celebra a lo grande. ¡Felicidades, Globo!

*Historiador de Huracán.